miércoles, agosto 06, 2008

A LA CIMA


Desde el próximo 18 de agosto, el español Rafael Nadal será el nuevo número 1 del mundo luego de estar durante tres años y diecisiete días a la espera de que Roger Federer cediera no sólo en su nivel de juego, sino sobre todo, aquellos puntos infalibles para estar en la cima.

Se puede discutir si uno tiene mejor revés que otro, si Rafa es mejor por “tenerlo de hijo” o si es mejor Roger por ser el primero del ranking desde febrero del 2004. Pero en el tenis como en muchos otros deportes, los números hablan por sí sólos. Es por eso que ambos se encuentran entre los mejores tenistas de toda la historia.

Mientras uno fue el mejor “indiscutido” durante cuatro años por encabezar el ranking, el otro fue quien poco a poco fue mejorando su nivel, ganando cada vez más torneos y partidos al suizo.

Si bien Federer empezó mejor el año ganando en Estoril, Nadal se consagró cuádruple campeón en Barcelona, Montecarlo y Roland Garros. En los últimos dos lo hizo venciendo a su máximo rival, a quien también le ganó en Hamburgo.

Así todos los ojos estuvieron puestos en Wimbledon, donde la previa fue inmejorable: simultáneamente Federer festejó en Halle y el español en Queen´s. La final terminó siendo un anticipo de lo que podía pasar para estas fechas y, claro está, estuvo del lado del mallorquín, quien además le ganó en 12 de 18 enfrentamientos, le impidió seguir agrandando el record de 65 partidos sobre césped, que...

Roger Federer dejará de ser el mejor del ranking pero seguirá siendo el segundo en títulos de Grand Slam (12) contra 14 de Pete Sampras, segundo en cantidad de finales consecutivas (17) detrás del sueco Iván Lendl (18), segundo en torneos de Masters Series, segundo en partidos ganados de forma consecutiva en Grand Slam detrás de Rod Laver (27 contra 29), record de finales consecutivas de Grand Slam con 10, record de partidos consecutivos en césped con 65 y en superficie dura con 56... la lista es interminable.


Estos números y más, dan vueltas por la cabeza de los apostadores y profesionales y seguidores del tenis. Pero lo único cierto más allá de todo, es que la historia se actualiza constantemente, el pasado hace al presente y el presente al futuro. El suizo dejó de ser invencible y, ahora, Rafa parece tener el camino liberado para extender su propio capítulo entre los grandes de este deporte.

SANTIAGO GABARI

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