Los Juegos Olímpicos de Beijing ya hicieron historia. Miles de competidores tuvieron el privilegio de formar parte de la mayor cita del deporte mundial y muchos menos quedaron en el recuerdo del movimiento olímpico por sus destacadas actuaciones. Atletas como el finlandés Paavo Nurmi y el norteamericano Carl Lewis, la gimnasta soviética Larissa Latynina y el nadador norteamericano Mark Spitz consiguieron nueve medallas de oro y se convirtieron así en los máximos ganadores de la historia de los Juegos. Todo esto hasta la jornada de ayer donde un Tiburón se los devoró...
Corrían las 10:21 de la mañana de Beijing (23:10 en la Argentina) y el estadio de natación, el ya famoso "Cubo de Agua", exponía la final masculina de los 200 metros, estilo mariposa. Con las seis medallas doradas conseguidas en Atenas 2004 y las tres conseguidas hasta el momentoen estos Juegos, el norteamericano Michael Phels había alcanzado la marca de aquellos cuatro fabulosos deportistas olímpicos. Esta era una de las pruebas que le darían la posibilidad de consagrarse como el mejor de la historia y nada pudo impedírselo.
Si bien fue una de las competencias más parejas que disputó, la ganó con gran autoridad. No fue fácil para Phels quien en el comienzo de la competencia se mantuvo detrás del ruso Nicolay Skvortsov aunque, a partir de los últimos 100 metros, el norteamericano tomó la punta para nunca más alejarse de ella. Un tiempo de 1m52s03 alcanzó para ganar su décima medalla dorada, cuarta en estos Juegos, y el cuarto récord olímpico seguido que marca en finales. De esta manera se convirtió en el atleta más ganador en la historia de los Juegos.
Pero no se conformó con eso porque, como si esto fuera poco, su verdadero objetivo es conseguir la marca de Spitz de siete oros con siete récords mundiales. Por eso una hora después se presentó con el equipo estadounidense para participar de la posta 4 x 200 en estilo libre. No sólo que no aflojó, sino que se hizo cargo de la primera posta, sacó una ventaja de más de dos cuerpos a sus competidores y bajó en más de 3 segundos el parcial del récord mundial. Un monstruo.
El equipo norteamericano ganó la prueba, mejoró la plusmarca en casi 5 segundos y se convirtió en el primer cuarteto en nadar por debajo de los 7 minutos (6m58s56).
Antes de estas pruebas se había quedado con los 400 metros estilos, los 200 libre y la posta 4 x 100 libre, donde, en un final espectacular, su compañero Jason Lezak superó en los últimos 5 metros a otra de las figuras de la natación, el francés Alain Bernard, que tenía una ventaja considerable cuando faltaba sólo una pileta para el final.
Ahora Phels, para alcanzar a Spitz, intentará quedarse con la victoria en los 200 metros estilos y en los 100 mariposa; y lo superará si participa del equipo norteamericano en la posta 4 x 100 estilos.
Corrían las 10:21 de la mañana de Beijing (23:10 en la Argentina) y el estadio de natación, el ya famoso "Cubo de Agua", exponía la final masculina de los 200 metros, estilo mariposa. Con las seis medallas doradas conseguidas en Atenas 2004 y las tres conseguidas hasta el momentoen estos Juegos, el norteamericano Michael Phels había alcanzado la marca de aquellos cuatro fabulosos deportistas olímpicos. Esta era una de las pruebas que le darían la posibilidad de consagrarse como el mejor de la historia y nada pudo impedírselo.
Si bien fue una de las competencias más parejas que disputó, la ganó con gran autoridad. No fue fácil para Phels quien en el comienzo de la competencia se mantuvo detrás del ruso Nicolay Skvortsov aunque, a partir de los últimos 100 metros, el norteamericano tomó la punta para nunca más alejarse de ella. Un tiempo de 1m52s03 alcanzó para ganar su décima medalla dorada, cuarta en estos Juegos, y el cuarto récord olímpico seguido que marca en finales. De esta manera se convirtió en el atleta más ganador en la historia de los Juegos.
Pero no se conformó con eso porque, como si esto fuera poco, su verdadero objetivo es conseguir la marca de Spitz de siete oros con siete récords mundiales. Por eso una hora después se presentó con el equipo estadounidense para participar de la posta 4 x 200 en estilo libre. No sólo que no aflojó, sino que se hizo cargo de la primera posta, sacó una ventaja de más de dos cuerpos a sus competidores y bajó en más de 3 segundos el parcial del récord mundial. Un monstruo.
El equipo norteamericano ganó la prueba, mejoró la plusmarca en casi 5 segundos y se convirtió en el primer cuarteto en nadar por debajo de los 7 minutos (6m58s56).
Antes de estas pruebas se había quedado con los 400 metros estilos, los 200 libre y la posta 4 x 100 libre, donde, en un final espectacular, su compañero Jason Lezak superó en los últimos 5 metros a otra de las figuras de la natación, el francés Alain Bernard, que tenía una ventaja considerable cuando faltaba sólo una pileta para el final.
Ahora Phels, para alcanzar a Spitz, intentará quedarse con la victoria en los 200 metros estilos y en los 100 mariposa; y lo superará si participa del equipo norteamericano en la posta 4 x 100 estilos.
El joven de 23 años nacido en Baltimore ya entró en la discusión sobre quien es el mejor deportista de la historia. En los próximos días buscará terminar con la discusión. Y eso no es todo, Londres 2012 queda a sólo cuatro años...
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