Cuando uno veía, hace pocos meses, esa lista de los 12 pilotos que habían entrado al controversial Playoff impulsado por la ACTC y no encontraba a un tal Gurí, todo era sorpresa. Este entrerriano, que año tras año luego de su debut en 1994 en aquellas Dos Horas de Buenos Aires, nunca estuvo exento de la lucha por el campeonato de la categoría. Se convirtió en los últimos tiempos en un grande del Turismo de Carretera. Claro que sí. ¿Por qué? Algo sencillo. La historia lo marca.
Con un Ford del equipo Trepat (el mismo con el que puso primera Ortelli), fue su primera temporada completa y se metió entre los seis mejores del torneo que ganó Traverso. No se bajaría nunca de ese grupo selecto. Fue campeón en 2004 y subcampeón cuatro veces. Pero en la temporada ´09 no había comenzado del todo bien. Al menos en el TC. Hasta que La Catedral lo vio renacer…
Después de un 2008 que se apagó rápido, sin chances de competir por pintar el Nº 1 en el Falcon amarillo, Martínez tomó fuerzas y pensó cambios en su estructura. Las carreras de fin de año sirvieron para incorporar a su equipo al chasista Cristian Ávila (hombre reconocido por sus éxitos) y darle lugar al motorista JJ Tártara. Año nuevo, nuevo auto y esperanzas renovadas. ¿Cómo empezó todo en Mar de Ajó y Balcarce? Para atrás. Roces con otros pilotos de punta lo dejaron sin nada: en el circuito de la costa, no se dieron lugar con Silva y chau domingo. En La Barrosa, también en la serie, se tocaron debajo del puente con Fontana y a salir desde el fondo. Dos inicios duros y trabajosos, ya que tuvo que salir bien desde el fondo. Pero ya la mano, había cambiado.
A pesar de no combatir por llegar primero a la bandera a cuadros, el Gurí demostraba tener un auto fuerte y veloz. Eso lo mostró en las clasificaciones. Y Buenos Aires no fue la excepción, claro. Con el 1-2 en la 2º serie con su nuevo compañero de equipo y coterráneo Mariana Werner (gran talento nacional), parecía que el de Entre Ríos ahora sí, iba a buscar ganar en el autódromo de los hermanos Gálvez después de casi cinco años.
Cuando estaba todo listo y el semáforo pasó de rojo a verde, el mano a mano con Pechito López (sin dudas el auto más rápido de todo el fin de semana) en la primera final de la Final, hacía imaginar un duelo épico. Esos que el circuito número 12 de la capital del país nos ha tenido acostumbrado a los largo de los tiempos. Pero cuando el Torino del cordobés siguió por la chicana en la primera curva (en las largas no se usa), la recta previa al curvón Saloto tenía como actor principal al Gurí. Él, viejo y zorro con sus 43 años y la muñeca intacta para resistir cualquier tipo de molestia pistera, se encaminó hacía el festejo. No le importó que atrás, las Dodge del Pinchito Castellano y Norberto Fontana se pasen seis veces entre sí. La carrera estaba en el freezer.
Así, casi servida en bandeja alcanzó una nueva victoria en el TC. Su 25 en el historial para empardar al quíntuple Ortelli, que otra vez se salió con la suya y llegó en el 4º puesto (gran maniobra para superar a Aventín y Ponce), sumando valiosos puntos para el torneo. Porque todos piensan en el Playoff. Ahora que saben las reglas del juego, saben que tiene que hacer para entrar entre los 12 afortunados. ¿Pregúnteselo al Gurí, sino?
EL PATO SILVA HABLÓ RECIEN BAJADO DEL AUTO
Como no podía ser de otra manera, el subcampeón de la categoría y quien más unidades cosechó en el 2008, habló con La Licuadora Deportiva horas después de meterse entre los 10 mejores del TC en Buenos Aires. Juan Manuel Silva, parte de una nueva estructura después de su alejamiento del JP Racing, analizó el fin de semana en La Catedral y dejó claro que piensa para el resto de la temporada. No te lo pierdas, en el Reproductor de Entrevistas…
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