En una entrevista exclusiva realizada por La Licuadora Deportiva, Miguel Correa se refirió a la clasificación para los Juegos Olímpicos y los objetivos que tiene para Beijing. También habló de la herencia que le dejó, Javier, su hermano, un gran palista, finalista Olímpico y medallista Panamericano.
Esta será la primera experiencia olímpica para uno de los cuatro hermanos Correa. Palista en K1 500 y K1 1000 metros, Correa necesitó da varias regatas para poder llegar a la clasificación a los Juegos Olímpicos. Más allá de esto, registró buenos tiempos, lo que permiten soñar con una final en Beijing.
El oriundo de Bariloche, tuvo la gran chance en el Preolímpico Panamericano de Montreal que se disputó en marzo de este año, pero no pudo clasificar a Pekín. Las oportunidades se habían terminado. Miguel ya no tenía chances olímpicas.
Los números en Montreal habían sido muy buenos. En K1 500 obtuvo el mejor registro en la general y en 1000 se ubicó cuarto. Los segundos le jugaron una mala pasada a Correa en la fase final. El desenlace fue tan ajustado que se debió utilizar el “Photo Finish”. Finalmente, y debido a resultados ajenos, se consideró el tiempo obtenido por el argentino en K1 500 y esto lo llevó a su primera clasificación Olímpica.
En la charla con La Licuadora Deportiva, Miguel Correa, se refirió a la llegada a los Juegos Olímpicos, el final de la preparación y de los objetivos próximos. Con un apellido emblema en el canotaje mundial, Miguel buscará continuar su propio camino, encontrar su propio nombre.
Este argentino vivió y disfrutó de los increíbles logros alcanzados por su hermano mayor. Tal vez, inigualable en el futuro. Pero más allá de todo, sabe que su apellido lo protege y lo obliga (de buena manera) a dejar una estela en las aguas chinas. Disfrutalo en EL REPRODUCTOR DE ENTREVISTAS…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario