Puede sonar fuerte el título de este comentario pero el Tour de Francia y el ciclismo en general están teniendo casos recurrentes de dopaje. En la edición de la máxima cita de este deporte, que se disputa en estos días, ya se detectaron tres casos de ingesta de Eritropoyetina (EPO).
Los españoles Manuel Beltrán y Moisés Dueñas y el italiano Ricardo Riccó fueron detectados en menos de una semana de competencia. El último caso y el más resonante fue el de Riccó ya que era el líder del equipo Saunier Duval que tuvo que autoexcluirse del Tour y excluir al italiano debido al escándalo producido.
En realidad el caso de Riccó no fue consumo de la ya tradicional sustancia EPO. Lo que se detectó en realidad fue la sustancia CERA (Continuos Erythropoietin Receptor Activator) o EPO de tercera generación. Esta es una variante que también produce un aumento de los glóbulos rojos en sangre (lo que oxigena el organismo y favorece a los deportistas en competencias aeróbicas) pero su efecto dura más tiempo. Esto permite consumirla con mayor anticipación a la prueba para dificultar su detección en los análisis de orina.
Este tipo de drogas no se pueden encontrar en las farmacias ni vienen incluidas en un medicamento para el resfrío. La ingesta de esta sustancia tiene un objetivo claro y es la mejora del rendimiento en competencia y esta situación hace cada día más escandalosa la situación del ciclismo mundial.
El caso de Riccó no fue el único que generó polémica. Dueñas pasó la noche en una comisaría donde tuvo que afrontar un interrogatorio de la policía. Además encontraron en su habitación ejemplares de sustancias prohibidas que todavía no fueron especificadas al público. Ese caso demuestra la culpabilidad del deportista, el cual muchas veces se excusa en el papel de víctima desentendiéndose de la situación. Así muchos casos se repiten dentro del ciclismo por más que el sprinter figura de este Tour de Francia, el inglés Mark Cavendish, insista con que “los casos de doping en el ciclismo son aislados”.
Lo cierto es que no es el único deporte que incurre en la trampa. El atletismo es otra de las disciplinas que recurrentemente cuenta con estos casos. Lo cierto es que si bien son muchos los ciclistas en competencia, son una gran cantidad los que ingestan estos productos para mejorar su rendimiento en forma ilegal. El porcentaje de los casos de doping sobre la cantidad de competidores es alto con relación a otras disciplinas.
Esta situación provoca que una de las ramas contaminadas del deporte haga peligrar la pureza (relativa) del tronco. El espíritu olímpico, las ideas de Coubertin están hace rato en peligro de extinción. El deporte corre riesgos de dejar de ser un juego, una demostración física y psíquica y un valor por el espíritu competitivo. Los intereses económicos, la necesidad de éxito a cualquier precio, los millonarios contratos publicitarios, las presiones sobre los competidores están ganando la pulseada.
Los españoles Manuel Beltrán y Moisés Dueñas y el italiano Ricardo Riccó fueron detectados en menos de una semana de competencia. El último caso y el más resonante fue el de Riccó ya que era el líder del equipo Saunier Duval que tuvo que autoexcluirse del Tour y excluir al italiano debido al escándalo producido.
En realidad el caso de Riccó no fue consumo de la ya tradicional sustancia EPO. Lo que se detectó en realidad fue la sustancia CERA (Continuos Erythropoietin Receptor Activator) o EPO de tercera generación. Esta es una variante que también produce un aumento de los glóbulos rojos en sangre (lo que oxigena el organismo y favorece a los deportistas en competencias aeróbicas) pero su efecto dura más tiempo. Esto permite consumirla con mayor anticipación a la prueba para dificultar su detección en los análisis de orina.
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Lo cierto es que no es el único deporte que incurre en la trampa. El atletismo es otra de las disciplinas que recurrentemente cuenta con estos casos. Lo cierto es que si bien son muchos los ciclistas en competencia, son una gran cantidad los que ingestan estos productos para mejorar su rendimiento en forma ilegal. El porcentaje de los casos de doping sobre la cantidad de competidores es alto con relación a otras disciplinas.
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