El paso de los argentinos en este Wimbledon no fue demasiado diferente de años anteriores. El día viernes las últimas presencias argentinas dejaron el pasto del All England y cerraron el paseo turístico por Londres.
Las apuestas no eran alentadoras de antemano, ya que la superficie no es la ideal para las características del juego de los argentinos. Esto se suma a que la principal figura que se destaca en ella, David Nalbandian (finalista en 2002), estuvo ausente.
Las expectativas se trasladaron automáticamente al jugador Nº 1 del país, Juan Martín del Potro, quien tuvo un cómodo debut pero se vio eclipsado por el australiano Lleyton Hewitt, quien lo derrotó 6-3, 7-5 y 7-5 en dos horas y 32 minutos en 2da Ronda. “Debo aprender a jugar en esta superficie”, concluyó Delpo con sólo 6 partidos jugados en La Catedral.
El resto del cuadro masculino tenía menos aspiraciones a llegar a segunda semana, pero de todos modos se puede sacar como positivo el buen nivel que mostró Leo Mayer, quien demostró que hoy está mejor que Juan Mónaco para ser el segundo singlista dentro de dos semanas en Ostrava. Cayó en segunda ronda 6-7 (4), 6-4, 6-4 y 6-4 ante Fernando González. Tuvo un buen primer set, pero el gran momento del chileno pudo más que las ganas del correntino. Ante los ojos de Vásquez, fue confirmación de su elección para la Davis.
Gisela Dulko fue, sin dudas y pese a que no pudo superar la tercera ronda, la gran protagonista de la semana argentina en Londres. Después de un gran triunfo, con remontada incluida ante Maria Sharapova, ex N° 1 del mundo, campeona de Wimbledon en 2004, se quedó en el camino ante otra rusa, Nadia Petrova por 3-6,6-3,6-4. Dulko, de 24 años y número 45 del mundo, no pudo conseguir su objetivo de entrar en octavos de final y lograr así su mejor resultado en el césped de Londres.
"Es la victoria más grande de mi carrera, el partido de mi vida, en el torneo más importante para mí, en la cancha central y venciendo a Maria. Es un gran día para mí, estoy muy feliz", dijo una sonriente Dulko el martes al concluir su encuentro por segunda ronda. Lo destacable de su actuación: controló sus nervios y pudo cerrar el partido. ¿Qué le falta para llegar al nivel de las grandes de la WTA? Regularidad, constancia, una cualidad que no siempre es fácil de encontrar en el circuito femenino.
Se terminó la excursión argentina por Gran Bretaña. Empezaron 13 y ninguno pudo avanzar a la segunda semana. El césped sigue siendo la cuenta pendiente del tenis nacional, que desde la final frustrada de Nalbandian, no tiene protagonista celeste y blanco. Un punto débil en la legión que se destacó en los últimos años y un objetivo a mejorar para el futuro.
Dejá Vú, un año atrás: Jueves 26 de Junio de 2008. Ante las derrotas de Martín Vasallo Argüello y Agustín Calleri frente al alemán Nicolás Kiefer y el francés Gilles Simon, respectivamente, Gisela Dulko fue la única argentina que llegó a tercera ronda, por abandono de Lindsay Davenport. En la tercera ronda Dulko se medió con la rusa Elena Dementieva.
Dejá Vú, un año atrás: Jueves 26 de Junio de 2008. Ante las derrotas de Martín Vasallo Argüello y Agustín Calleri frente al alemán Nicolás Kiefer y el francés Gilles Simon, respectivamente, Gisela Dulko fue la única argentina que llegó a tercera ronda, por abandono de Lindsay Davenport. En la tercera ronda Dulko se medió con la rusa Elena Dementieva.
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