En horas nada más comienza el repechaje olímpico para el handball argentino. Debido a la derrota en la final panamericana frente a Brasil (30 a 22), el equipo dirigido por Eduardo Gallardo debutará hoy, a las 13 hora argentina, frente a Islandia en el torneo que se llevara a cabo en la ciudad de Wroclaw, Polonia.
Las posibilidades de clasificación son ínfimas. La Argentina, además de enfrentar a los isleños (a priori el equipo menos peligroso), tendrá partidos contra Suecia, mañana en el mismo horario, y contra el local, el domingo a las 15.30. Éstos dos equipos de primerísimo nivel mundial.
Los equipos que clasificarán a los Juegos serán los que queden en los primeros dos lugares por lo que, salvo raras circunstancias, los dirigidos por Dady Gallardo tendrán que ganar dos partidos como mínimo si quieren llevar al handball argentino a disputar su primer Juego Olímpico.
Además de este torneo, se disputarán paralelamente otros dos grupos con las mismas disposiciones de clasificación. El primero tendrá lugar en París, Francia, donde el local y España son los candidatos. El otro en Zagreb y también el anfitrión será uno de los favoritos junto al conjunto ruso.
Más allá de que los jugadores van a hacer el máximo esfuerzo para llegar a la cita de agosto, el objetivo de la dirección argentina esta puesta en Londres 2012. El trabajo que hizo el entrenador con los juveniles recién se esté empezando a plasmar en el primer equipo. Jugadores como Federico Vieyra, parte del histórico cuarto puesto del Mundial Juvenil de Bahrein, recién se están mechando con referentes como Eric Gull y Andrés Kogovsek. El objetivo es mechar a estas generaciones y poder formar un equipo competitivo en el mediano plazo.
"Con los jugadores experimentados más algunos juveniles se puede armar un equipo competitivo de primer nivel mundial, a la altura de las potencias de Europa". Textual de Gallardo. Esas declaraciones hacen ilusionar a todo un país handballístico que nunca pudo dar el salto de calidad a nivel selección. Y esta nueva dirección ayuda a esto porque tuvo resultados importantes en juveniles, porque con ellos volvieron figuras como Gull, Kogovsek y Gabriel Canzoniero que se mantuvieron marginados en la gestión de Mauricio Torres, y porque su proyecto promete y tiene la aceptación de la mayoría del ambiente de esta disciplina.
El plantel está completo y las esperanzas intactas. Argentina va con su máximo arsenal para tratar de conseguir el milagro en su última posibilidad de ser olímpico. Sea cual sea el resultado, habrá que ver principalmente el rendimiento que muestre, ya que la importancia, hoy por hoy, no es tanto el resultado próximo sino el mediato.
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