martes, mayo 06, 2008

VOLVER A EMPEZAR

La vida tiene sus vueltas. Arriba de la pista para algunos, es una cuestión cotidiana. Pero, justamente en lo cotidiano, la vida a veces te da alegrías y festejos, y cuando menos lo esperas, te desgarra el corazón. Para los pilotos cada competencia es un mundo aparte. La preparación, la concentración, los sentimientos, todo aflora en los días en que el buzo antiflama es parte de su piel. Cada día es un volver a empezar para cada uno. Pero para Norberto Fontana, la carrera en Río Negro va a ser difícil de olvidar. Mucho volvió a empezar en esas tierras. Mucho se recordó lo que costó volver a empezar después de un golpe durísimo para todo un equipo…

“Llegó el silencio y el frío con la soledad…” El 8 de Mayo, hace tres años atrás, el equipo y toda la familia Toyota del TC2000 recibía un sacudón más fuerte que pegar contra un muro o un talud de tierra. El día en que Nicolás Vuyovich ganó en el autódromo El Zonda, en San Juan, pocas horas después, murió en un accidente de aviación cuando se trasladaba de la provincia cuyana a la capital cordobesa. Además, del piloto salteño, querido por toda la categoría, fallecieron Gustavo Ramonda (director de la escuadra), su hijo de 8 años, Hugo Suárez (socio comercial de Ramonda), Daniel Reinoso (piloto) y Mario Corti (copiloto). Una catástrofe que caló hondo en uno de los planteles de mayor capacidad dentro del automovilismo argentino. Y eso se notó con el tiempo.

“Se fueron los aplausos y algunos recuerdos…” Luego de haber celebrado el 1-2 de la marca ese mediodía de sol, el de Arrecifes no volvió en avión con ellos porque había ido en auto con Carlos Pairetti y su padre. Cuando iba por Río Cuarto, le avisaron del accidente. De aquel 8 de mayo pasaron tres años sin victorias de Toyota. Y de la última del Gigante, casi cuatro (fue el 30 de mayo del 2004 en Paraná), casi una eternidad para el campeón 2002. Parece un giro de la vida, un volver a empezar en el mes de Mayo, tan especial cuando es la hora de rememorar viejas vivencias.

“Yo seguiré adelante atravesando miedos…” Era una gran incógnita. Esa es la verdad y lo fue hasta hace no mucho tiempo, la continuidad del piloto que supo subirse a un Formula 1 en el equipo de la empresa japonesa. Se sabía que el verano ´08 iba a ser decisivo a la hora de establecer un parámetro para la presenta campaña. El color negro vestía la mayoría de las competencias del equipo en la última temporada y eso podía hacer tambalear su continuidad. Pero cuando el Corolla pareció que se desplomaba en las subidas y la altura de Salta, se despabiló en el valle de del “Parque Ciudad de Gral. Roca”.

“Queda mucho por andar… Y mañana será un día nuevo…” Una un signo de que todo podía cambiar el pasado fin de semana. A fines de Abril, el equipo realizó una prueba en el Oscar Cabalén de Córdoba y todos salieron fascinados. Sentían que algo bueno estaba por venir. Y así fue. Los Toyota mejoraron en la suspensión delantera, el tren trasero y la aerodinámica. Todo esto sirvió para que Fontanita dominara a placer la carrera clasificatoria y la Súper Final. De punta a punta. Aguantando los mimos del Pato Silva, el auto rojo y negro se encaminó hacía una victoria más que especial. Inolvidable para Norberto, el equipo y la familia Vuyovich. La mama de Nico, Norma, se lo anticipó cuando se corrió la segunda fecha en Salta mientras compartían juntos una empanada con carne cortada a cuchillo: “Ya falta poco, el momento de cumplir la promesa se acerca…”

Fue sentida por todos, porque todos sufrieron lo que pasó hace casi tres años atrás en el tiempo. Porque Fontana se debía un triunfo como el que obtuvo en Gral. Roca: perfecto como su capacidad de conducción. También es un balde de agua fría al fuego que se había encendido en el equipo y las presiones de la fábrica Toyota para los argentinos. Del 8 de Mayo de 2005 al 4 del mismo mes pero de 2008, Fontana y compañía celebraron su regreso. Volver a empezar…

Ortelli se acomoda en la punta: Guillermo Ortelli consiguió lo que buscaba: muchos puntos para el campeonato. Parecía un objetivo inaccesible cuando en la carambola inicial de la complicada primera curva de la carrera clasificatoria su Renault fue golpeado y dañó el radiador. Esperó sin desesperar pese a que largó la final desde el 28º puesto. Y desde allí inició una espectacular escalada que lo elevó al quinto lugar en la pista. Gano uno más luego de la bandera a cuadros. Pero no fue uno más porque ese peldaño lo subió ante el recargo a Matías Rossi, hasta entonces su escolta en el campeonato. Sus ocho puntos pasaron así a ser 10 y ésto le dio una ventaja de otros 10 sobre Juan Manuel Silva, el nuevo segundo en el torneo (45 contra 37)

Ovalo dado vuelta: Ocurrió cuando quedaban 250 metros para que terminara la clasificatoria. En la pelea por el quinto puesto, Martín Basso aguantó un roce de Mariano Werner en la entrada a la última curva, que es veloz. Pero a la salida, hubo otro topetazo del Toyota rojo y el Focus se fue rumbo al público, ubicado en ese lugar a sólo 17 metros del asfalto. El rafaelino intentó evitar el golpe, pero terminó en vuelco cuando el Ford chocó contra el talud que marca el límite del circuito con el lugar en el que se ubican los espectadores.

Se viene el show por las calles: La próxima del TC 2000 será en 15 días en el nuevo trazado callejero de Santa Fe. Un espectaculo para ver sentado... desde la terraza.

No hay comentarios.: