En un deslucido partido y a pesar de que la albiceleste mereció mejor suerte, Argentina se llevó un punto de tierras brasileñas tras empatar 0-0 en Belo Horizonte y se ubica segundo en las Eliminatorias de Sudáfrica 2010, a dos puntos de Paraguay.
Desde el arranque del partido se sabía que no sería de los duelos más bonitos entre ambas selecciones. La devaluación de nombres en un equipo y el otro fueron una clara muestra del bajo nivel que atraviesan dos de los mayores potreros del mundo. No faltan jugadores, pero tal vez un presente o aquello que se llama “equipo”. En el conjunto local no estuvieron Ronaldo (lesionado), Ronaldinho (no fue convocado) y Kaká (lesionado) entre otras figuras, y en Argentina faltó el destello de Carlos Tévez, debilidad del público carioca.
Lo cierto es que el desarrollo fue muy pensado, cauteloso y hasta con algo de miedo en los bancos por las pobres actuaciones que vienen desempeñando, sobre todo los dirigidos por Dunga. Cualquiera que hubiese apostado un poco más se hubiera llevado el triunfo.
Así en el primer tiempo apenas se vio un cabezazo de Julio Cruz que suavemente cruzó a las manos del arquero, un tremendo remate en partida doble de Julio Baptista que Roberto Abbondanzieri salvó con una mano, un enredo de Robinho que provocó que el uno argentino lo corriera por todo el borde del área y un remate cruzado de Lionel Messi que, tan cruzado salió, se fue al lateral a unos tres metros de la línea de fondo.
Luego de los casi veinte minutos de descanso y reflexión por parte de los entrenadores y futbolistas, el “jogo bonito” no apareció por el estadio. Cruz lo tuvo en su pie izquierdo luego de una gran habilitación de Juan Román Riquelme pero la mandó por arriba del travesaño y Messi lo pudo ganar sobre el final con dos remates en la misma jugada: en el primero salvó Julio César y el rebote se fue desviado.
El fútbol del que tanto se espera que muestre la Selección se hace desear. El equipo de memoria que le gusta tener a Alfio Basile no aparece. Aún no hay un sistema definido de juego y tampoco posibilidades de repetir formaciones. En tanto Gago, Riquelme, Masche y Jonás Gutiérrez fueron de lo mejor del conjunto argentino. Sobre todo el ex Vélez, que con el ida y vuelta por el sector izquierdo fue importantísimo para darle equilibrio al mediocampo. Lo del volante central del Real Madrid fue sobresaliente. Sin dudas, por importancia y juego, lo mejor desde que esta en la Selección Mayor.
El balance de estas dos fechas no es positivo. Hasta el más optimista hubiera firmado un empate con Brasil, y por ser un clásico de tal magnitud (más de 4 millones de dólares de recaudación) es coherente cualquier resultado. Sin embargo los dos puntos que se perdieron tras el empate con Ecuador en el Monumental, son los que nos separan del conjunto guaraní y son los que no se pueden desperdiciar.
La próxima jornada será en setiembre y el seleccionado tendrá la posibilidad de quedar como único puntero si vence como local a Paraguay el día 6, y el 10 le toca contra Perú en Lima.
SANTIAGO GABARI
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