Marcos Paz es su lugar en el mundo. Al igual que la pista de atletismo. Porque desde que le tomó el gustito al deporte, no lo quiere dejar. Ni por una semana, como sucedió en la pasada, después de trotar por diferentes partes del continente americano. Es que este chico tuvo un mes de Julio para el recuerdo. De él, de toda su familia, para la gente de su ciudad y del atletismo argentino. Un nuevo diamante sale de nuestras tierras. Y este se llama Braian Toledo.
En el 2006 y con 12 años, tomó la jabalina y no la soltó más. Hasta ahora, es parte de su cuerpo. Sueña con ella, y porque no también la tiene bien cerca cuando duerme. En tiempos difíciles, donde el apoyo no abunda para nada, el deporte argentino sigue mostrando la aparición de grande valores para nuestro futuro. Cuidado. Serán, en tiempo futuro, si el trabajo del Estado en conjunto con las empresas privadas le brinda a la actividad lo que realmente merece. Por esto es necesario que chicos como Braian reciban becas como la que se confirmó en su vuelta a la Argentina a través de la Secretaria de Deportes. Nada es gratis. Nada es barato. Y en nuestro país, menos.
Si en 19 días, Toledo logró ser triple medallista en torneos de nivel internacional, ¿ustedes creen que estoy loco? He aquí el nuevo miembro de la Familia Adams. En Bressanone (Italia), logró el bronce en el Mundial de Menores (Sub 18) Dos semanas después, en San Pablo, fue plata en el Sudamericano Juvenil (Sub 20) Y para cerrar el mes número siete en el calendario con gloria total, ganó el Panamericano Sub 20 con un lanzamiento que le valió ser la quinta mejor marca argentina de todos los tiempos en mayores. Increíble.
Como no puede ser de otra forma, La Licuadora Deportiva charló con Gustavo Osorio, el entrenador de esta promesa joven de nuestro deporte. Y a continuación, las palabras de Brian, otra figura que el atletismo argentino recibe para creer en grande… No te lo pierdas en el Reproductor.
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