jueves, septiembre 18, 2008

Día del Boxeador: 85 años después

Para la década del ´20 el boxeo en la Argentina comenzaba a popularizarse ya que anteriormente era un deporte exclusivo de las clases acomodadas. Había sido introducido en el país por boxeadores británicos y franceses que se convirtieron en profesores de personajes como el doctor Carlos Delcasse y el ingeniero Jorge Newbery quienes ayudaron a difundir la disciplina a través de clubes como GEBA, el Boxing Club Buenos Aires y el Jockey Club, entre otros.

Las peleas en la Capital Federal se efectuaban en forma restringida, de manera clandestina o en sitios privados con acceso exclusivo debido a la prohibición de boxear que se mantenía desde el año 1892. Por este motivo la disciplina se extendió al conurbano principalmente hacia Avellaneda. En una época en donde las clases acomodadas buscaban aventuras en deportes de riesgo como la aviación o el automovilismo, el boxeo también tomó impulso. Debido a su evolución, el 23 de marzo de 1920, se fundaba la Federación Argentina de Box.

Ya los campeonatos argentinos se disputaban desde hacía varios años a través de la antigua Asociación Argentina (creada en 1910) y ya establecidos los años ´20 algunos campeones argentinos, y también sudamericanos, comenzaban a surgir como leyendas del deporte. El caso más emblemático de la época fue la pelea que Luis Ángel Firpo disputó con el campeón mundial de peso completo, el estadounidense Jack Dempsey.

El 14 de septiembre de 1923 un boxeador latinoamericano participaba, por primera vez, en una pelea de esta magnitud. Esa noche, ese primer round en el Polo Grounds de Nueva York, bastó para que ese combate fuera considerado como “La Pelea del Siglo”, y también, que esa fecha dejara instituido en la Argentina el "Día del Boxeador".


Para Dempsey era su sexta defensa y era amplio favorito frente al argentino que llegaba como campeón . En ese primer round atrapante, Firpo cayó en siete oportunidades y cuando parecía que el combate se terminaba en favor del norteamericano, un golpe del “Toro Salvaje de las Pampas” (como lo apodó el periodista local Damon Ruyon) sacó del cuadrilátero a Dempsey a falta de 20 segundos para finalizar esa vuelta. La cinta muestra como tardó 17 en levantarse, ayudado por periodistas y aficionados. Incluso se ven imágenes cortadas que permiten sospechar que la filmación fue adulterada para acortar el tiempo interminable que demoró el arbitro en el conteo.

En el segundo asalto Firpo cayó en dos oportunidades más y, en esta última, el KO fue indeclinable. Pero esto fue sólo un detalle en un día histórico para el deporte argentino. Un boxeador de este país disputó el título mundial en la categoría más popular y contra uno de los peleadores más importantes de la historia, cuando la disciplina de los puños recién daba sus primeros pasos en este lado del mundo.


LAS REPERCUSIONES DE “LA PELEA DEL SIGLO”

En la Argentina la pelea fue seguida por millones de personas. En Buenos Aires, el combate fue transmitido por Radio Sud América, aunque en realidad sólo se trató de la lectura de cables informativos. Casi 2500 personas pagaron 50 centavos para seguirla retransmitida en el Luna Park y, también, el diario La Nación dispuso de un aparato telegráfico para poder contar con la noticia al instante, generando que otros 10000 interesados se acerquen para enterarse de los sucesos.

Nunca antes un espectáculo deportivo había movido a tanta gente. Toda esta repercusión produjo que el 13 de noviembre de 1923, dos meses más tarde, la prohibición tan polémica se levantara. A partir de ese momento los festivales y los aficionados al deporte se multiplicaron rápidamente.

A nivel amateur los resultados se vieron rápidamente. El boxeo se convertía en el deporte olímpico más importante para la Argentina ya que en 1924 el bronce de Pedro Quartucci quedaba como la primera medalla de la historia. Además, en 1928 llegaron los oros de Víctor Avendaño y Víctor Peralta junto a otros éxitos que vendrían hasta el decaimiento a partir de la década del ´50.

A nivel profesional, el boxeo dio su primer campeón mundial en la categoría mosca a través de Pascual Pérez, quien también había sido oro olímpico en los Juegos de Londres 1948. A partir de Pascualito también aparecieron figuras como Horacio Accavallo, Nicolino Locche, Víctor Galíndez, Carlos Monzón y una enorme lista que continúa hoy en día encabezada por Omar Narváez y con promesas futuras comandadas por Marcos Maidana. La época de oro pasó, pero el boxeo siempre se mantiene vigente.

Si querés escuchar la historia del día que el boxeo en la Argentina nació de forma furioza y el análisis de la actualidad del deporte de los puños, no podés perderte en el REPRODUCTOR DE ENTREVISTA, la voz de un especialista: WALTER VARGAS, un amante del box.

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