¿Jordan? No, era Jordania. En varios pasajes del partido, los asiáticos le hacían honor al nombre de su país en lengua inglesa. Después de casi dar la sorpresa en la apertura del torneo frente a los australianos, y de la mano de Rasheim Wright, con sus buenas penetraciones, más los tiros de tres de Ayman Idais, este plantel que se rinde ante su rey Abdalá II, complicó a los conducidos por Sergio Hernández. Justamente Oveja, sentado en el banco durante los tres primeros cuartos, volvió a levantarse en el parcial definitivo. Después de llegar a una máxima de 20 en la mitad del 2º período (46-26), a partir de ahí se vino con todo Jordania. Con su potencia perimetral, clavó un parcial de +17 (20-3), que complicó la rotación y el descanso para los titulares de la selección nacional. Sin imaginárselo, el técnico tuvo que apostar por sus líderes en cancha (Scola-Delfino-Prigioni) para que la Argentina tome aire y respire tranquilo (o no tanto) en los minutos finales. Sin dudas, la defensa en zona que planteó el rival, mostró falencias para atacarla. Sin buena efectividad en los lanzamientos externos (abajo del 35%), Scola mantuvo la diferencia a menos de 10 con su aporte goleador. Automático, volvió a cerrar el juego con un doble-doble (30 puntos y 13 rebotes) y permitió que el resultado (88-79) fuera favorable, en un desarrollo que reflejó el peor partido en defensa del equipo.
LAS PERLAS ANTI JORDAN
De calidad pese a la derrota. Si contra los jordanos se vio la actuación más baja del equipo en la primera fase, el último juego del Grupo A fue algo más que un excelente partido para la Generación Dorada. Porque si lo comparamos con el resto de los encuentros de la fase eliminatoria, por equipos y nivel de juego, los que tuvieron la suerte de presenciar el duelo entre argentinos y serbios en Kayseri, vieron el mejor básquet en Turquía 2010. Fue derrota por 84-82 en una final electrizante, similar al de cualquier cruce por cuartos o semifinal. Los dos dieron todo y quisieron quedarse con el 1º puesto de la zona. Con un tremendo comienzo de partido, Argentina impuso el ritmo que quería: con ofensivas largas, Prigioni tuvo un parcial impecable, que finalizó 22-20, pero que tuvo a la selección con 13 de ventaja (21-9) De ahí en más, fue todo muy parejo. Serbia se quedó con el segundo y tercer cuarto. Una diferencia de 11, parecía sentenciar la historia. Pero triples de Gutiérrez, Prigioni y Quinteros, sumado a las batallas que libraba Scola debajo del aro, puso en juego al seleccionado. Empatados en 75, el desequilibrio estuvo a 20 segundo del epílogo: Dusko Savanovic metió un triple de frente al aro que fue clave. Unos libres de Paolo le pusieron suspenso al final, que quedó para los serbios, como el 1º lugar del A.
PERLAS EN EL ADIOS A KAYSERI
- DOS POTENCIAS SE SALUDARON. Fue un match que tuvo todos los condimentos de un juego por algo más que el 1 en la zona. Argentina, con el mejor partido de Prigioni en el Mundial (13 tantos, nueve asistencias y una gran presencia en defensa contra Teodosic, el 4 de los serbios), sostuvo el fluido desarrollo de los europeos, que con una mayor rotación y aporte de los suplentes (terminó 49 a 17 a favor de los ganadores), pudieron quedarse con el triunfo. Igual, Hernández se fue feliz por el planteo y como jugó su equipo.
- HOLA, SOY FABRICIO. Después de estar encerrado en su habitación en el hotel, Oberto vio la luz y salió para acompañar a sus compañeros al estadio. Ojeroso y con pérdida de peso (está con cinco kilos menos), ya ingirió algunos sólidos y se alista para estar el martes en Estambul vs. Brasil.
- MVP El Luifa, con 32 puntos y 13 rebotes, volvió a ser la figura en los números y sigue siendo el máximo anotador del Mundial. Con 12-19 en dobles (62%) y 8-11 en libres, le sumó un robo y dos bloqueos a su labor espectacular. Digno de ver fue su duelo ante el pívot serbio, Krstic. ¿Quién ganó acá? No hace falta aclararlo, ¿no?
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