
Una vez más, a sufrir. O a gozar. Depende como transcurra la súper acción en Lyon. A pocas horas que argentinos y franceses pisen la cancha, el juego del misterio terminó con algunas certezas y otras sorpresas. ¿Quién dijo que los capitanes no utilizan su mote de líderes y maniobran en la búsqueda de despistar al otro? Claro, y sobre todo cuando de un lado está Modesto Vázquez, viejo zorro, conocedor de estas situaciones límite. Y Guy Forget, el francés por adopción que nació en Casablanca, Marruecos. El coach del equipo galo, campeón como jugador de la Davis en 1991 y 1996, también supo conducir al país a levantar la Ensaladera como capitán en 2001. En esa recordadísima final en Melbourne contra Australia, Nicolás Escudé (figura al ganarle a Lleyton Hewitt el 1º juego) ganó el último punto de la serie para celebrar en el Rod Laver Arena.


Como toda previa al 1º día, si decimos que como visitantes, terminamos 1-1, ¿ustedes firmarían? Creo que si analizamos el panorama, en los papeles, Mónaco tiene en sus manos la llave de la victoria. Contra un jugador de dobles por excelencia y que viene de abandonar en la 3º ronda del Abierto de los EE.UU., un triunfo de Pico puede ser un golpe de escena en y para Francia. Sino, el sábado, cómodos con la superficie y con lo que vienen mostrando en los torneos que han disputado en la temporada, el dúo Zeballos-Schwank esta listo. Enfrente, tendrán al mismo Llodra (dependiendo del rendimiento y como termine el viernes) y Arnaud Clement.
Argentina nunca pudo con Francia. Ni allá, ni acá. 0-4 está la estadística. ¿Será esta la vencida? Con David en la cancha y el ambiente que reina en el grupo, la hazaña está cerca…
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