sábado, septiembre 29, 2007

El DÍA MÁS ESPERADO

Mañana, desde las 12 del mediodía en nuestro país, Argentina e Irlanda juegan el último y más esperado partido de la Zona D. Si bien hay que tener en cuenta muchos factores, ambos pueden clasificar a cuartos, o uno de los dos quedar afuera de la primera fase de eliminación.

Los números, los “tal vez” rodean al mundo del rugby cuando se habla del encuentro entre Los Pumas e Irlanda. A pesar de esto amos planteles aseguran que van a “salir a ganar”, que no importa el punto bonus, la cantidad de tries. Sólo quieren ganar.

Para Argentina esta oportunidad es tener la revancha ansiada, luego del partido en la Copa del Mundo de 2003, cuando en tierras australianas Irlanda los derrotó 16-15. A la vez, nadie olvida el try de Diego Albanese, en el Mundial de 1999, cuando Los Pumas dieron el batacazo.

Pero esto es pasado, como también los amistosos ganados por los argentinos a los irlandeses en los dos últimos años. Nada sirve para este encuentro. Actualidades y equipos diferentes. El mismo objetivo: clasificar a cuartos de final.

Por el lado de Irlanda, este equipo que llegaba con mucha más confianza que lo que demostró en todos los partidos que disputó. El mal juego y desinteligencias invadieron la seguridad en el plantel. En cambio, Los Pumas plantearon un perfil de menor a mayor. Con una sorpresa para muchos al principio, como haberle ganado al local, Francia, y con dos partidos siguientes muy diferentes entre sí, como lo fueron ente Georgia y Namibia.

Más allá de todos estos datos, el partido entre Irlanda y Argentina, será un hecho aislado, más allá de las repercusiones del juego a partir de los últimos entrenamientos. Ambos equipos saldrán a ganar, a clasificar a cuartos, a buscar el primer puesto para no enfrentar a Nueva Zelanda. Tendrán cuidados y arriesgarán.
Irlanda buscará clasificar como siempre lo ha hecho, Argentina buscará llegar a esta instancia por primera vez, con el sentimiento y la predisposición que caracteriza a este plantel. Será un partido inolvidable, como todo sentimiento que Los Pumas transmiten en cada pelota. Ya se juega...

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