

YA COMIENZA....
De Francia no quedó más que un equipo desdibujado, desmotivado y con un plantel de individualidades. De Argentina quedó la alegría de cerrar de la mejor manera este mundial histórico, donde dejaron todo. Se viene un futuro increíble en el rugby argentino. Lo mejor está por llegar.
Un dique ubicado a 1350 metros sobre el nivel del mar en la Precordillera de los Andes. Agua de deshielo proveniente del Río Mendoza que oscilan los 14º C de temperatura y vientos regulares de 10 a 24 nudos de velocidad. Montañas reflejadas en esa agua cristalina que provocan un efecto espejo y generan un paisaje que transmite pura tranquilidad. Este es el panorama del lugar donde se está efectuando el Campeonato Mundial de Windsurf para la categoría Raceboard. Un mundial que, en general, se realiza en los países europeos y que volvió a Sudamérica después de 30 años.
El Dique Potrerillos no tiene muchos antecedentes en este tipo de eventos. Comenzó a organizar competencias de la especialidad en 2003 cuando se ocupó del Campeonato Argentino. Luego también el Campeonato Sudamericano en 2004 y el Campeonato Abierto de la República en 2006 (Selectivo para los Panamericanos).
Con todos estos torneos exitosos no se tardó mucho en conseguir ser sede de un Mundial, a pesar del tiempo que no se competía en la Argentina. Se realizaron propuestas en la IWA (Asociación Internacional de Windsurf) y se presentaron pedidos para organizar el evento. En febrero de 2006, en plena celebración del torneo Sudamericano de la especialidad, integrantes del ahora comité organizador lograron llevar a Potrerillos a un dirigente de la IWA. La cautivación de éste significó un gran avance en la negociación y la consecuente aprobación del evento.
Esta semana se está presenciando la competencia con las máximas figuras del mundo tanto entre los hombres como las mujeres, incluida la participación del eslovaco Patrik Polar, último campeón mundial, y la italiana Alexandra Sencini, múltiple campeona mundial y medallista olímpica.
Entre los argentinos el que más se está destacando es Mariano Reutemann, medalla de plata en los últimos Juegos Panamericanos. Al cabo de 6 regatas se mantiene en la primera ubicación cuando restan otras 6 para terminar la competencia.
Mientras que el Mundial de rugby compra la atención de todos los argentinos, mientras se vive la semana previa al Superclásico; hay una competencia de relevancia internacional en el mundo de la náutica. Una competencia sin repercusión a nivel nacional pero que, producto del esfuerzo de sus organizadores, toma relevancia para Potrerillos y para toda la provincia de Mendoza.
Desde el comienzo, la llegada de Bolívar a tierras europeas significó un hecho histórico para la Liga Nacional de nuestro país. Nunca un equipo argentino había realizado una gira tan significativa y menos ante equipos de primer nivel.
El objetivo principal, ante el conocimiento del nivel de los equipos a los que iban a enfrentar, era sumar experiencia y ajustar los últimos detalles para la Copa Mercosur, que se jugará entre el 16 y 21 de octubre en Misiones y Formosa.
Lo cierto es que “Las Águilas” sorprendieron desde el inicio al derrotar 3-2 a Cuneo de Italia y luego 3-2 a Montechiari en la definición del Torneo de Courmayeur. En este último equipo debutó Luciano de Cecco, el armador de la Selección Argentina que proviene del Plan de Talentos implementado por Bolívar.
En España, los dirigidos por Javier Weber se enfrentaron al campeón Drac Palma Portol y perdieron 3-2, aunque en el segundo y tercer encuentro entre ambos se impusieron los argentinos 3-0 en las dos oportunidades.
Fue histórica la gira por el alto nivel de juego demostrado por los argentinos, por los resultados obtenidos y por la imagen que deja un equipo argentino en Europa donde, a nivel clubes, presentan los mejores y más competitivos torneos del planeta.
Se viene la Copa Mercosur. Bolívar integra la Zona A junto a Misiones Voley, a Sada Betim de Brasil y ADO de Chile. La Zona B la integran La Unión de Formosa y Gigantes del Sur de Neuquén y los brasileros Unisul y Barao Blumenau. Será una Copa exigente a nivel juego, ya que están los mejores equipos de Brasil y los planteles argentinos fueron reforzados para este torneo.
Bolívar va a buscar una nueva copa, un nuevo torneo, sumar en juegos y en números. El nivel está, los jugadores también. ¿Habrá algún equipo que logre equiparar su nivel y que haga aún más atractivas la Copa Mercosur y la Liga Nacional?
En la primera competencia en el estadio Nagai, Lauro participó en la etapa clasificatoria del lanzamiento de bala. El hombre de Trenque Lauquen marcó 19,19m con lo cual quedó al margen de la definición en el 13º ubicación del grupo A. El otro que compitió el primer día fue Carriqueo que quedó afuera en la tanda clasificatoria de los 1500m al registrar 3m42s20. García en garrocha (4,20m) y Pietrobelli en jabalina (74,81m) cumplieron su actuación quedando en las etapas clasificatorias.
Las máximas esperanzas para el logro de un avance hacia una final mundialista con color argentino estaban depositadas en Dahlgren y en Chiaraviglio. Sus registros personales y su progreso en los últimos tiempos generaban una incógnita en el enfrentamiento entre ellos, sus rivales y sus respectivos implementos (el martillo, para la residente en los Estados Unidos, y la garrocha, para el último campeón mundial juvenil).
Sin embargo, ninguno de los dos tampoco pudo acceder al igual que el resto de la delegación. Chiaraviglio quedó en la duodécima posición del Grupo A (18º mejor de la prueba), con una marca de 5,55 metros. Lo de Germán se sabía que era complicado ya que necesitaba superar los 5,75 metros (su marca personal es 5,71) o quedar entre los primeros 12 participantes. Entre los 31 participantes sólo 6 competidores tenían registros similares a los de él y los demás saltaron más alto en la temporada.
Por su parte, Dahlgren no pudo meterse en la final de lanzamiento de martillo femenino al terminar undécima en el Grupo A con una marca de 65, 64 metros. La recordwoman sudamericana con 72,94 metros, vivió una mala jornada en la que no estuvo ni cerca de la clasificación a la final. Y lo que genera más disgusto es que una marca de 69 metros, nada imposible para ella, la hubiera depositado claramente en la final.
Igualmente, el saldo de la actuación es positiva. En esta edición del Mundial se duplicó la delegación con respecto a Helsinki 2005 (asistieron Juan Cerra, Jorge Baliengo y Dahlgren). Además, Baliengo quedó al margen de la competencia de disco en Osaka debido a una lesión en un hombro que hubiese subido la delegación a siete integrantes.
En cuanto a los resultados, exceptuando a Ale García, el resto de los argentinos son atletas jóvenes en pleno progreso y con poca experiencia en competencias de esta jerarquía. Hay que hacer la evaluación teniendo en cuenta este aspecto que atenta contra la precisión de los deportistas. Lo ideal sería que el surgimiento de esta camada genere una atención diferenciada en esta disciplina y que permita su desarrollo, para que estos jóvenes talentosos puedan explotar al máximo sus cualidades y vuelvan a depositar al atletismo argentino donde alguna vez estuvo.
Si hay algo por lo que se ha destacado en su corta, pero exitosa carrera deportiva es el empeño, la fuerza, y sobre todo, la perseverancia. Así fue su vida. Desde chico tuvo que aprender como era vivir una infancia dura y tempestuosa, estar acostado en su cama junto con sus hermanos y los padres, escuchando los balazos y los gritos fuera de la ventana. Así era la vida en Fuerte Apache. Se acostumbró a eso. Y es por esto que todo lo que tuvo que sobrepasar luego, más o menos tarde, supo como entender la situación y llevarla para delante. Carlitos se rebela y se fortalece. Y eso lo hace líder en una clase de futbolistas que crece a granel.
A partir de ahora, viste una de las camisetas más importantes del mundo. Cuestión que ya conoce y sabe como manejar. En 2003, Carlos Bianchi lo recibió en Boca tras un mediocre sudamericano juvenil con un lugar en la reserva. El fundador de Piola Vago, le respondió enseguida con goles de todos los colores. Primero en el equipo que jugaba el Clausura y luego en la Libertadores, en la que fue incluido sólo a partir de octavos de final. Boca salió campeón de América con un golazo suyo en el Morumbí. En 2005, Corinthians lo recibió con un plantel dividido y lleno de peleas internas. El iraní Kia Joorabchian lo estableció como bandera del Timao y se vino todo lo conocido: título, idolatría y el color celeste y blanco que inundó la torcida brasilera.
Después de tantos logros (no podemos olvidar la medalla lograda en Atenas 04, donde fue la figura del equipo de Bielsa que le dio la presea dorada al fútbol por primera vez en la historia del país), Carlos Tevez llega a los Diablos Rojos con la expectativa de ser el rey en tierras inglesas. Todos, pero todos están más que felices con su arribo. Sus compañeros saben que tiene un juego que rinde en cualquier parte del globo. El cuerpo técnico lo trajo para que se sume a Ronaldo y Rooney, para formar un trío letal, de los mejores del fútbol europeo. Como Tevez en Argentina es Carlitos, y en Brasil fue Carlinhos, hoy en Inglaterra su camiseta tiene su apellido arriba del Nº 32. Pero en el ambiente de los bares y por el Olf Trafford ya le dicen Sir Charles…
Y esta situación se debe a las notables actuaciones que tuvieron el Pato Cabrera y el Pigu Romero. El primero, a pesar de no tener un año regular, se destapó en el Abierto de los Estados Unidos con una victoria, ni más ni menos, sobre los locales Tigre Woods y Jim Furyk, uno y tres del mundo en ese momento (Furyk hoy es el segundo en el escalafón). Por su parte, Romero explotó en la segunda mitad del año y obtuvo cuatro top ten seguidos, entre ellos el tercer puesto en el Abierto Británico y el título en el Abierto de Jugadores de Europa, en Alemania. Estos resultados le permitieron llegar a este torneo como los número 18 y 25, respectivamente.
A esta dupla se le suma la regularidad que tuvo José Coceres. Si bien no se destacó por excelentes actuaciones, el chaqueño llega a Southern Hills para participar en un Major después de cuatro años.
Con estos estandartes, el golf lucha por convertirse en la disciplina del año. Ya se presenció un comienzo de año con actuaciones destacadas de Ariel Cañete que consiguió su primer título de la PGA, el desarrollo de otra promesa como es Rafael Echenique, la destacadas actuaciones de Eduardo Romero en el circuito Senior, entre otras.
Lo que se vive ahora en el cuarto Major del año es la intriga por saber si los argentinos pueden repetir los rendimientos de los últimos dos torneos grandes. Zach Johnson, en Augusta, Cabrera, en Oakmont y Padraig Harrington, en Carnoustie; fueron todos ganadores debutantes de Grrand Slams esta temporada ¿Se podrá evitar que Woods defienda el torneo? ¿Tendremos otro argentino debutante campeón de un Major o, por qué no pensar en la posibilidad que un Pato le pueda volver a morder la cola al Tigre?
El triunfo que consiguieron Eduardo Schwank y Horacio Zeballos en el dobles de tenis el último día de competencia le permitió a la Argentina superar por una medalla dorada a Venezuela y trepar al séptimo lugar del medallero. De esta manera, igualó la ubicación conseguida en los últimos Juegos Panamericanos de Santo Domingo 2003. Las estadísticas marcan que la delegación nacional finalizó con 59 preseas (11 oros, 15 platas y 33 bronces) quedando a tres oros de Colombia y a siete de Méjico, sexto y quinto, respectivamente. Esto demuestra que con las actuaciones que tuvieron muchos atletas nacionales, la posibilidad de escalar aún más alto estuvo bastante cerca. Pero el punto negativo no pasa por ahí.
En cuanto a las estadísticas, se vio un retroceso con respecto a Panamericanos anteriores. Desde Mar del Plata ´95, donde se consiguieron 40 medallas doradas, empezó a haber un descenso en las competencias siguientes. Winnipeg ´99 achicó el número a 25 y Santo Domingo a 16. Con el resultado de Río se mantuvo esta pendiente negativa en cuanto a lo estrictamente estadístico.
A pesar de esta situación que parece negativa, hay un aspecto positivo que es la increíble aparición de talentos que surgen en situación en donde la estructura deportiva no es la mejor. Competidores del atletismo, ciclismo, natación, remo, judo, entre otros, llegan a destacarse en sus disciplinas a nivel internacional cuando la ayuda que reciben para su preparación está lejos de ser la mejor, ya sea a nivel económico como a nivel organizativo y estructural; ya sea por responsabilidad de la Secretaría de Deportes como de sus respectivas federaciones nacionales. Por este motivo, no se puede decir que estos Juegos tienen un matiz negativo cuando deportistas como Francisco Nievas (Karate), Miguel Albarracín (Judo) o Gabriela Díaz (Bicicross) consiguen los títulos luego de tanto esfuerzo.
El lado negro de la historia se encuentra en la estructura que rodea a los deportistas. Porque hay varias federaciones que no destinan eficientemente los fondos que reciben del Estado. Porque muchas veces los dirigentes de las mismas operan negligentemente perjudicando a los protagonistas. Porque el presupuesto que se le destina a Deportes no es prioridad en las partidas de la Nación y son escasas para las necesidades del área. Porque, en muchos deportes, no se ve un plan de desarrollo para que no sólo aparezcan nuevos talentos que continúen con el legado, sino también, para que se tome al deporte como una forma de vida en una gran porción de la sociedad.
La exigencia por los resultados aparece porque el talento existe y genera insatisfacción el hecho de que esté opacado por cuestiones burocráticas. Hay que considerar que hubo una crisis económica en el 2001 que afectó al deporte. Con el tiempo, se comenzó a mejorar lentamente en el presupuesto y la estructura deportiva a través de la gestión de Claudio Morresi en la Secretaría. Sólo queda esperar que esos pequeños brotes tengan un próspero desarrollo y que, poco a poco, los deportistas puedan encontrar un respaldo para una placentera práctica de la actividad que lo apasiona.